Nuestras piezas de joyería pueden darnos placer durante toda la vida, e incluso más allá,
si se cuidan regularmente y se protegen del estrés extremo.
Trabajamos exclusivamente con oro de 18 quilates de muy alta calidad, que a pesar de su alto contenido puede ser delicado,
precisamente por ser uno de los metales más blandos.
La piel, las cadenas o incluso la piedra preciosa, cuando se usan a diario actúan como papel de lija sobre el oro.
Por lo tanto, es aconsejable revisar regularmente las joyas en busca de señales de desgaste y, si es necesario, hacer que un experto las repare.
Trabajamos con sumo cuidado y con los más altos estándares de calidad,
para crear la joya perfecta y la pieza de joyería perfecta para usted.